Sin embargo, el 9 de abril Francia rompió el acuerdo con el pretexto de que los créditos de Juan Bautista Jéquer, un suizo nacionalizado francés -con inusitada y sospechosa rapidez- con lo que los réditos también adquirieron naturaleza francesa y dio inicio la segunda intervención francesa aunque hay indicios de que se urdió desde octubre de 1861 ―después del encuentro de Biarritz de la Emperatriz Eugenia y José Hidalgo― por una carta escrita por Napoleón en la que expresa sus intenciones de ofrecerle la corona a Maximiliano.
Debo, no niego, pago, no tengo - Claudia Guerrero Sepúlveda | link original