CFE sola no podrá salir

Este texto de Darío Celis Estrada, publicado el 29 de enero de 2025, analiza las implicaciones de un proyecto de ley secundaria del sector eléctrico en México, así como la crisis financiera de PEMEX. El artículo destaca las dificultades para cumplir con las metas de generación de energía eléctrica y las consecuencias negativas para la economía mexicana, particularmente en el contexto del nearshoring.

El proyecto de ley impone a la CFE una meta de inversión casi imposible de cumplir: mantener el 54% de generación estatal.

Resumen

• El proyecto de ley secundaria del sector eléctrico mantiene reglas de despacho basadas en costos de generación y confiabilidad, con todas las plantas compitiendo en igualdad de condiciones, incluyendo las de la CFE.
• El Cenace (Centro Nacional de Control de Energía) permanece como organismo técnico independiente de la CFE.

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• Se impone a la CFE la meta de mantener el 54% de generación estatal, lo cual requiere una inversión de 11.34 GW en los próximos seis años, una cifra difícil de alcanzar dado el ritmo actual de 0.53 GW por año.
• Los tiempos de espera para nuevas turbinas se han extendido entre 24 y 36 meses, dificultando aún más el cumplimiento de la meta.
• La CFE también enfrenta el reto de ampliar su red de transmisión, actualmente congestionada.
• Se estima que la CFE necesitaría incrementar su presupuesto de inversión anual en un 65%, lo cual es poco probable dadas las restricciones de finanzas públicas.
• La falta de capacidad de generación de energía eléctrica, junto con la escasez de agua, pone en riesgo la atracción de inversiones relacionadas con el nearshoring y el éxito del Plan México.
• PEMEX, dirigida por Víctor Rodríguez Padilla, enfrenta una deuda con proveedores cercana a los 700 mil millones de pesos, lo que ha provocado despidos y una disminución en los ingresos de empresas internacionales como SLB y Halliburton. La falta de claridad en los tiempos de contratación de PEMEX genera incertidumbre en las proyecciones futuras.

Conclusión

• El proyecto de ley secundaria del sector eléctrico, aunque presenta aspectos positivos, plantea retos de inversión casi imposibles de cumplir para la CFE.
• La crisis financiera de PEMEX agrava la situación económica de México y amenaza la atracción de inversiones extranjeras.
• La falta de capacidad de generación de energía eléctrica y la escasez de agua son obstáculos importantes para el desarrollo económico de México, especialmente en el contexto del nearshoring.
• La situación requiere una reevaluación de las metas de inversión y una mayor transparencia en la gestión de las empresas estatales.