Análisis de Columna de Opinión El ambicioso plan para el Sector Salud de la presidenta Sheinbaum en El Economista

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Este texto de Eduardo Ruiz-Healy, publicado el 6 de noviembre de 2024, analiza el nuevo Programa de trabajo del sector salud 2024-2030 presentado por la presidenta Claudia Sheinbaum en México. El artículo explora tanto los aspectos positivos del programa como los desafíos que enfrenta su implementación.

Resumen:

Claudia Sheinbaum presentó un ambicioso programa de salud 2024-2030 enfocado en un bienestar integral (físico, mental y social).
El presupuesto del sector salud ha aumentado significativamente desde 2019 (de 128,000 millones de pesos a 159,000 millones de pesos en 2024).
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Las metas incluyen la promoción de la salud y prevención, mejora en la calidad de la atención, fortalecimiento del IMSS Bienestar, aseguramiento de medicamentos e insumos, y modernización con expediente electrónico universal.
Se han observado avances en el IMSS, como un gasto histórico en equipo médico y la implementación del expediente clínico electrónico.
Persisten las críticas debido a desafíos logísticos en el suministro de medicamentos y equipo, a pesar del aumento presupuestal.
La nueva estrategia de compras consolidadas, aunque necesaria para evitar la corrupción, ha enfrentado problemas de coordinación y logística.
La falta de infraestructura y personal sigue siendo un obstáculo importante, especialmente en zonas rurales y alejadas.
La pandemia de COVID-19 impactó negativamente en los recursos del sector, retrasando la implementación de proyectos clave.
La percepción pública se ve afectada por casos de escasez y atención deficiente, generando desconfianza a pesar de los avances.

Conclusión:

El programa de salud 2024-2030 es ambicioso y tiene buenas intenciones, pero su éxito depende de la resolución de problemas estructurales y operativos. Aumentar el presupuesto es un paso positivo, pero no garantiza la mejora del sistema de salud si no se abordan los problemas de logística, infraestructura, personal y percepción pública. El verdadero reto para el gobierno es traducir la inversión en soluciones concretas y tangibles para los pacientes mexicanos.