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El texto es una columna de opinión escrita por Tania Lara, miembro del Servicio Exterior Mexicano (SEM) desde 2015. En ella, expone la problemática de los salarios del personal diplomático mexicano, que no han sido revisados en 25 años, y cómo esta situación afecta su calidad de vida y la de sus familias, especialmente en ciudades con alto costo de vida como Montreal.

El salario mensual de Tania Lara como Cónsul de Asuntos Económicos y Políticos de México en Montreal es de 5,045 dólares estadounidenses.

Resumen

• El sueldo del personal diplomático mexicano no ha tenido revisiones ni aumentos en 25 años, lo que los coloca en una situación vulnerable frente al encarecimiento global y en comparación con sus pares de otros países del G20.
• Tania Lara, Cónsul de Asuntos Económicos y Políticos de México en Montreal desde 2022, percibe un salario mensual de 5,045 dólares estadounidenses, que apenas alcanza para una vida modesta en una ciudad con un costo de vida elevado.
• El costo de vida en Montreal es un 50% más alto que en la Ciudad de México, lo que dificulta el acceso a una alimentación saludable y a una vivienda digna.
• Las parejas de los diplomáticos enfrentan dificultades para encontrar empleo en el país sede, lo que convierte al diplomático en el único sostén económico de la familia.
• La constante movilidad del SEM afecta la educación de los hijos, obligándolos a inscribirse en escuelas internacionales con colegiaturas elevadas.
• La rotación del personal diplomático es una estrategia para evitar la asimilación al país receptor y garantizar una visión renovada, pero tiene un alto costo para los diplomáticos y sus familias.
• Tania Lara celebra las declaraciones de la Presidenta Claudia Sheinbaum de revisar y actualizar el tabulador de sueldos del Servicio Exterior Mexicano.

Conclusión

• Actualizar los sueldos del Servicio Exterior Mexicano es necesario para defender el humanismo de la política exterior mexicana y garantizar una remuneración acorde con la responsabilidad y complejidad de sus labores.
• Defender a quienes representan a México en el mundo es una forma de defender a México.
• El trabajo diplomático es una vocación de sacrificio constante que exige resiliencia y adaptación a cambios culturales continuos.